Ahora, al haber dicho esto, hago como todos y me adelanto a los hechos. Porque no lo ha dicho aún, no le has preguntado, pero lo sabes, porque te has tomado la molestia de buscar dónde saberlo. Y es cuando lo dice, justo mirándole mientras te lo esta diciendo, cuando crees saber que la realidad que nombra no es la real sino otra que no esta hecha para que tú te la creas. Es en ese preciso instante cuando te preguntas si debes dar un paso atrás para coger impulso y lanzarte al vacío o si dar un paso atrás pero para marcharte.
Dicen que nunca sabes cuando puedes estar o no equivocado y que a causa de eso no puedes juzgar del todo a quien conoces de poco, que debes olvidar los miedos porque la idea de elegir la elección equivocada no debe frenarte, que por intentarlo no se pierde nada pero que si no lo intentas puedes perderlo todo.
(Olvidan que perdemos tiempo y horas de sueño)
(¿Es la sinceridad la que acompaña al sonido que crean sus palabras o son sólo parte de un plan lleno de artimañas que acostumbra a usar para arañar y engatusar gatas?)
Si alguien nos hablará claro, ese será el tiempo.
Un mar de dudas en el que no sabes cual de ellas terminará siendo hecho y acierto.